Hospedaje Maria

Nos hospedamos aquí 5 noches...Baño no muy limpio con MUCHOS pelos en la bañera y wc que permanecieron ahí desde el día que llegamos hasta el día que nos fuimos y éramos los únicos que nos hospedamos allí, un asco.Las habitaciones simples y limpias, si te toca en el salón prepárate para dormir poco ya que alguien de la casa ronca todas las noches durante toda la noche, cuando no es eso es el perro empujando los boles de comida, o incluso alguien de la casa viendo un concierto en la televisión con mucha volumen, lo cual no pude descansar durante el día ese día y era el único que teníamos para descansar ya que los otros habíamos realizado trekkings.El desayuno consiste en; pan, queso, mantequilla, un yogur, te (una variedad) y café. MUY básico, se echa en falta fruta por lo menos. Después de 5 días comiendo tostadas con queso ya cansa.La cocina cierra a las 8:30pm!!!!!!! Lo cual me parece vergonzoso ya que llegamos tarde de las excursiones y lo último que queremos y también es muy costoso es cenar fuera todas las noches. Y aquí viene lo mejor, solo se puede hacer sopa, arroz, y pasta. Cocinar carne, verduras y otras cosas (adjuntare foto) no está permitido, que además no podrías hacer ni aunque quisieras ya que la cocina lo usan como salón entonces no tienes privacidad y están todo el rato viendo como cocinas. Nosotros cocinamos solo dos veces por esa razón. Al llegar no nos explicaron nada tema cocina, lo que podíamos usar y no usar o si podíamos guardar cosas en la nevera.

Exelente lugar...limpio y tranquilo...buen desayuno...

Excelente estadía muy buena atención

Llegamos con pocas expectativas a es te hospedaje y por que no teníamos mas opciones, finalmente nos quedamos tres noches.

Le falta vida y mejor atencion

Es muy buenoGracias

Es un hospedaje familiar. Es pequeño y limpio .Es atendido por doña Maria. Son habitaciones privadas con baños compartidos. Ubicado en el centro y a 6 cuadras del terminal de buses

Muy buena atención

Me encantó,excelente atención