Hotel Salto del Laja

Viajé por el funeral de un familiar y nos hospedamos aquí.Raya para la suma, sí volvería y fue una grata experiencia, sin embargo, tiene un par de puntos a mejorar.Oportunidad de mejora:- detalles de limpieza- sistema de calefacción de habitacionesSu fuerte:- una vista increíble- buenas alternativas en la carta- la RICA HOSPITALIDAD DE SU GENTELamentablemente en nuestra visita producto del fallecimiento de un familiar, se juntó con la desgracia de las inundaciones, sus trabajadores estaban afectados y pseudo colapsados y aún así buscan dar un buen servicio, amable por defecto.Les agradecemos su hospitalidad, y les enviamos un abrazo, volveremos.Éxito y bendiciones para sus familias.

Hotel:Lo bueno: cómodo, con mucho espacio para recorrer y conocer, cuenta con piscina natural, la playa del río, piscina, canchas, etc y todo frente al salto. El desayuno variado y contundente.Lo malo: pocas Reposeras en los espacios para la cantidad de huéspedes, nuestra habitación no cerraba con pestillo el ventanal por lo que tuvimos que andar con la cartera en todo momento y muy calurosas ( hay ventilador).Restaurante: lo único bueno fue Natalie quien tuvo excelente atención mientras los demás estaban en la puerta, un garzon me dejo hablando sola… en fin falta organización, no puede ser que un garzon tenga mesas adentro y afuera. Comida regular, creo que uno espera más para ser el restaurante del hotel.

En el restaurant, primero, nos lograron acomodar una mesa para 15 personas sin ningún inconveniente. A pesar de que los platos tardaron en llegar (el restaurant a capacidad completa), valió la pena la espera. Muy rica la comida! La mesera tuvo muuuucha paciencia con todos (incluyendo niños). Nada que decir, 10 de 10

Ubicación privilegiada, personal amable. Sin embargo no recomiendo ir en verano, desconozco si fue sólo mi habitación pero no cuenta con ventilación/aire acondicionado y el calor es sofocante. La vista es increíble, desayuno acorde. Infraestructura falta mantención. Es muy lindo lugar para ir a desconectarse pero considerar lo anterior.

Siempre nos ha gustado, hoy la calefacción de las suite matrimonial es malísima, una simple estufa estufa eléctrica que no alcanza a calentar el lugar, solicitamos otras y nos dicen que no se puede porque se cae el sistema, solo nos ofrecieron otras habitaciones con calefacción central, pero que eran más pequeñas y no del nivel que habíamos pagado (no nos ofrecieron modificación de precios). A mejorar totalmente la calefacción y la autonomía de decisión que puedan tener las personas del hotel.

Opinión respecto al restaurante: la comida es asquerosa, pedimos ñoquis y nos trajeron prácticamente puré molido de consistencia grumosa con tomates de mala calidad, el milkshake en realidad era una leche Colun con un poco de crema. El valor de la comida no se condice con la mala calidad de los productos.

Comentaré sobre el restaurante. Concuerdo con darle 1 estrella nada más por la vista del salto. Sin embargo, en general el servicio es terriblemente lento. demoraron en tomar el pedido, fueron trayendo de a gotera las cosas, el pan e individuales. Demoraron más de 1:30 horas en traer la comida. Lo más desagradable es que llegaba gente después y eran atendidos antes... La comida no es mala... pero no vale el tiempo de espera, y la cantidad es bastante poco para lo que vale. Por mi parte no recomiendo el restaurante y no volvería....

Estuvimos en una suite matrimonial con vista directa al Salto, muy recomendado, espectacular. Con bonitos colores de otoño.A la cena fuimos al restaurante de este mismo Hotel, donde pedimos pato (dan una mitad de pato, bastante) y ciervo (rico, bien preparado). La atención fue rápida, cortés, sin ningún problema.De nota importante: acudimos en temporada baja, restaurante con pocas personasDefinitivamente para volver

Lugar encantador para hacer un alto en viaje al sur,parque precioso para recorrerlo,con ciervos,caballos ,buen dormir ,buen restaurant,las vistas desde las habitaciones son increíblemente bellas,buen desayuno,personal amable,le falta eso si una buena remodelación de las habitaciones y los baños son muy antiguos para los cánones de hoy

Un hotel tradicional y cómodas habitaciones con vista directa al Salto del Laja, Región del Bío Bío. Un buen restaurante con un menú de esquisitos platos, destacando el pato asado y ciervo asado. Se puede acceder a senderos para caminar con hermosos paisajes y abundante naturaleza, se recomienda 100%, vale la pena estar allí.