Residencia San Vicente de Paul

Pésima administración del lugar. Todos los días, a las 4 am la persona que va a dejar pan se pone a tocar la bocina para que le abran. Les pedí hicieran algo, y me dijeron que era un problema de los guardias, que lo iban a ver, pero no solucionaron nada

Antes de la Pandemia era un lugar muy agradable, pero después de esto he escuchado varios comentarios diciendo que es un lugar muy precario, sucio, falta de personal poca empatía y cero amabilidad.Quizás el problema sea la administración, al final son ellos los que contratan personal ineficiente, o poco preparados.(No todos).Será la misma administración que hace 4 años, cuando empezó la Pandemia?

Conozco el lugar y me pude dar cuenta que el personal no tiene vocación y tampoco capacitación , ( no son todos , pero la gran mayoria ) lo que es lamentable , ver como los abuelitos , están muy solos y descuidados en su aseo personal , empezando por la guardia de ojos azules que esta en la puerta , cero empatía , no lo recomiendo .

Pésimo lugar, alta rotación de personal, poco personal, la comida es pésima, tienen muy pocas actividades y son a cualquier hora y día, los fines de semana quedan en total abandono. En pandemia ha sido un caos, no dan ninguna facilidad a las familias para que tengan contacto con los residentes, solo les interesa que no salgan para que no hayan contagios, es lo mas parecido a una cárcel. La residencia pertenece a la Fundación San Vicente de Paul pero estos no se hacen presentes en nada, no hay con quien resolver ningún problema, porque la directora no tiene las atribuciones ni tampoco la voluntad para resolver ni mejorar nada. Tampoco les informan a los familiares las cosas que suceden ahi, problemas o accidentes. Mi padre falleció ahi y nadie se dió cuenta que estaba enfermo. Horrible lugar.

pésima atención, el aseo de las piezas es paupérrimo, todo con sarro, infectado de baratas, arañas y ormigas, en pocas palabras es un asco el lugar, el enfermero no se mueve de su oficina y les falta personal

Tengo una amiga ahí, que visito muy amenudo y he podido comprobar que otras residentes no tienen la misma suerte , pues al conversar con ellas me cuentan lo solas que se sienten y que nadie las visita. Y además que no tienen como comunicarse.A lo mejor un teléfono comunitario donde ellas se puedan comunicar con su familia y a la vez que uno las pueda llamar ayudaría mucho , para evitar sentirse solo.Tambien pienso, que si se hiciera un espacio de saludos por internet y que se les haga llegar a la residente o paciente, esta se sentiria feliz, pues siempre es bienvenido un ha llegado carta".Ahora si esto está en uso

Muy acogedor, todo muy limpio